J.K. Rowling y Milli Hill: La paranoia de ser silenciadas

Fabiola Díaz de León @escdesenoritas

En Reino Unido la política inclusiva que se sustenta en su legislación ha logrado permear la sociedad y se han dado casos que han llegado hasta los juzgados donde hay cero tolerancias para las posturas excluyentes en materia de los derechos de la población trans y no binarie. Sin embargo J.K. Rowling, escudada en su celebridad, no ha cejado en su defensa de posturas no incluyentes, se asume transfóbica y se empeña en defender, ante cuanta oportunidad, de abanderar a personas que comparten su aversión hacia las disidencias de género. Esta vez se dedica a promover y felicitar a la autora Milli Hill. 

Hill, que tiene 2 libros sobre partos y maternidad que denuncian violencia obstétrica y un tercero sobre menstruación, sostiene que tales temas están sujetos a lo femenino desde el punto de vista de la biología y que sólo las mujeres pueden sufrir los embates del patriarcado con la violencia obstétrica. 

Todo comenzó en noviembre cuando Hill comenzó a cuestionar el uso de la figura de “mujeres y personas gestantes” que considera a embarazos de hombres trans y personas no binaries que no se identifican con las etiquetas de femenino o mujer. 

Contrario con lo que sucede en España que todavía se debate en aprobar una Ley Trans por los embates del feminismo radical que es profundamente anti derechos trans, Inglaterra defiende a capa y espada los derechos ganados de la diversidad y la ciudadanía actúa acordemente con cualquier discurso anti derechos al respecto. 

Ante la cultura de la cancelación, que tan en boga está en la actualidad, no se tientan el corazon para solicitar boicotear los intereses económicos de nada ni de nadie que se salga de los límites de lo políticamente correcto por lo que Milli Hill ha sido excluida de organizaciones que anteriormente apoyaban sus libros, discursos y movimiento, el Positive Birth Movement. 

Ambas autoras, Rowling y Hill, se han escudado en el lema de “no seré silenciada” aún cuando en el revuelo de un solo tuit el hombre trans que cuestionó un mensaje de Hill no apelaba a silenciar a nadie. Lo que se señala en ambos casos es su postura anti derechos de la diversidad. 

La realidad es que el feminismo (que no es uno sino variantes de muchos) adopta posturas antagónicas que debilitan el movimiento en sí mismo adoptando posturas a favor y en contra de la diversidad y los derechos ganados en diversas latitudes del planeta. 

La diversidad no tiene nada que agradecer al haber consolidado sus derechos, los derechos no se agradecen, se defienden y se ejercen. 

Post Author: anodis