A 67 años de su muerte, Reino Unido homenajea a Turing

Por Fabiola Díaz de León

Alan Turing fue un matemático inglés que dio las bases del sistema binario del que parte la ciencia de la informática. Él es la sombra que reside detrás de las computadoras que ahora rigen nuestra existencia. Siendo homosexual en la primera mitad del siglo XX en UK sin importar su gran aportación durante la II Guerra Mundial para decodificar los mensajes que usaban los nazis con sus aliados del Eje y que permitió ganar la guerra a los Aliados; Turing se declaró como homosexual y fue obligado judicialmente a someterse a un tratamiento hormonal de castración química que lo sumió en una profunda depresión que lo llevó a envenenar una manzana y suicidarse comiéndola en 1954.

En 2013 la Reina Isabel II reconvino en reconocer la enorme labor de Alan Turing y se posicionó en una postura de disculpa por la corona de haber tenido prácticas semejantes hacia los homosexuales en el pasado. Ahora toca el verdadero homenaje a Alan Turing: para la segunda mitad del 2021 el nuevo billete de 50 libras esterlinas llevará su imagen, fecha de nacimiento y una cita.

​Turing no ha sido el único miembro de la diversidad sexual castigado y orillado al suicidio por el rechazo social e institucional, estos casos se cuentan por miles hasta la fecha, pero es nuestra labor en medios como éste que seamos visibles como comunidad y esa unidad nos proporcione la fuerza para seguir adelante gozando de libertad y ganando derechos de igualdad en las democracias donde se pueda.

​Pugnar para que todos los segmentos de la diversidad sexual y de género gocen de igualdad es un compromiso que debemos adoptar para evitar que nuestros sectores sean señalados en lo individual y sucedan situaciones como la de Alan Turing. Levantar la voz ante injusticias y discriminación en el trabajo, en lo familiar, en las calles, en todos los sitios donde se presenten es una reacción imperativa para que se erradiquen las diferencias y quedemos todxs cobijadxs.

​La manzana arcoíris mordida, logo de Apple, viene de la manzana letal de Turing. Fue su decisión no esconderse y aceptar su homosexualidad a sabiendas del castigo y costo que eso le acarrearía. 67 años más tarde su rostro estará ligado a todas las transacciones de su país inmortalizado en un billete. Es poca justicia para él, pero mucha para la población LGBTQ+ del mundo.

​Alan Turing recibe más que un monumento, se integra al día a día de la nación que lo condenó para sumirlo en las sombras y quiso borrarlo de la historia. La moneda de un país es su arma más poderosa. Alan Turing en este billete nos recuerda que su historia no se repita jamás. Está en nuestras manos que así sea. Que no toleremos estigmas ni discursos de odio no importa de dónde vengan. Que somos un bloque que hemos resistido y luchado por décadas para asumirnos como lo que somos: personas que amamos o nos expresamos diferentes pero iguales ante la Ley.

Post Author: anodis