La Vela de las Auténticas Intrépidas Buscadoras del Peligro, una de las festividades más grandes de la diversidad sexual de Juchitán, Oaxaca, regresó después de dos años detenida por la pandemia por Covid-19.
En esta festividad se celebra la vida y la muxeidad, como se le llama a las personas de la diversidad sexual en el Istmo de Tehuantepec.
La Vela de las Auténticas Intrépidas Buscadoras del Peligro conformada por más de una veintena de personas, reafirmó que es la fiesta de la inclusión más grande del mundo, ya que hubo más de 8 mil asistentes disfrutaron, bailaron y gozaron de una noche sin estereotipos.
“Es necesario que la sociedad deje de mirarnos y criticarnos, nosotros lo único que pedimos es tolerancia y que se acabe la ignorancia”, comentó Amurabi Méndez, uno de los integrantes más jóvenes.
La noche brilló para las muxes y la reina “Melissa”, primera mujer trans de Oaxaca en obtener su reconocimiento, y también la primera en trabajar en una oficina pública, por lo que es doblemente reconocida por su labor de activista.
De acuerdo con la comunidad muxe del Istmo de Tehuantepec en un recuento colectivo, suman alrededor de 25 crímenes de odio contra la comunidad muxe.