La Marcha Lencha 2025: continuidad histórica del activismo lésbico en CDMX

Este sábado 21 de junio, colectivos como Red de Madres Lesbianas en México, Musas de Metal, La Lenchada y Me amo, te amo trans saldrán en contingente conjunto desde la cafetería Somos Voces hasta el Ángel y el Monumento a la Revolución. Su objetivo: visibilizar demandas específicas —espacios seguros, cultura propia y salud integral— a través de una movilización que combina marcha y evento cultural.

Una historia de autonomía y rebeldía

El activismo lésbico en Ciudad de México tiene raíces profundas, vinculadas al surgimiento del Frente de Liberación Homosexual (FLH) en 1971, impulsado por Nancy Cárdenas. Mujeres lesbianas participaron activamente en marchas desde fines de los 70, como parte del Movimiento de Liberación Homosexual, y el contingente lesbiano estuvo presente ya en 1978 durante marchas conmemorativas, siendo protagonistas en la primera Marcha del Orgullo en 1979.

La primera Marcha Lésbica independiente se celebró en 2003, con el propósito de reconocer públicamente su identidad y exigir igualdad sin depender de movimientos mixtos. Desde entonces, surgieron acciones autónomas como el Lencha Fest en 2024, promovido por la Red de Madres Lesbianas en México, que abordó la visibilidad cultural y política lésbica con talleres, mesas y arte.

La Marcha Lencha en perspectiva

  • Autonomía feminista y safismo: Movilizaciones como La Lenchada se enmarcan en una lógica de sororidad que reivindica la independencia del activismo lésbico frente a lógicas machistas.

  • Agenda integral: Más allá de visibilizar, la marcha plantea demandas concretas: salud, cultura, derechos reproductivos, espacios seguros y servicios.

  • Contingente plural: La unión de redes como Musas de Metal o Me amo, te amo trans fortalece el carácter interseccional del evento.

Contexto actual y retos

La Marcha Lencha 2025  busca fortalecer identidades específicas dentro del gran movimiento. Las participantes articulan las memorias colectivas de lucha con demandas contemporáneas: acceso a servicios de salud, educación con perspectiva de género y espacios libres de violencia.

Su fuerza radica en la continuidad histórica y en la capacidad de organizar actividades culturales, pero también en reafirmar que la identidad lésbica es política y forma parte de la diversidad sexual con visibilidad plena.

Hoy, la Marcha Lencha es una práctica política feminista con memoria histórica, que recoge décadas de lucha desde Nancy Cárdenas en los 70 hasta los festivales actuales. Será también un acto de presencia, de autonomía y de visibilidad: una marcha que no solo celebra, sino que exige reconocimiento, justicia y espacios sostenibles para las mujeres lesbianas y sus aliadas.

Post Author: anodis