Convivencia y seguridad, pilares para crear espacios libres y seguros para la comunidad LGBTIQ+

En México, la comunidad LGBTIQ+ enfrenta desafíos en la creación de entornos seguros y confiables, a pesar de los avances en el reconocimiento de sus derechos. Según Safe Zone, movimiento enfocado en la construcción de espacios incluyentes, uno de los retos clave es generar entornos sanos y seguros para la comunidad.

Según el Inter-American Development Bank (IDB), los espacios urbanos a menudo reflejan sistemas de dominación y suelen excluir a personas disidentes de la cis-heteronorma. Esto viola el derecho de las personas LGBTIQ+ a usar el espacio urbano y las invisibiliza y vulnera.

En México, hay aproximadamente 5 millones de personas con diferentes orientaciones sexuales y géneros, según el INEGI. La Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y Género de 2021 revela que hay 4.6 millones de personas pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+ y 909 mil que se identifican con un género distinto al cis.

A pesar de la presencia permanente de la comunidad LGBTIQ+ en la sociedad mexicana, las leyes y políticas públicas aún son deficientes en cuanto a garantizar la protección y bienestar de las personas LGBTIQ+ en espacios públicos y privados. Según el informe “El prejuicio no conoce fronteras”, publicado por Sin Violencias LGBT, hubo 1,300 asesinatos de personas con orientaciones sexuales o identidades de género diversas entre 2014 y 2020, de los cuales 402 ocurrieron en México.

Ante este contexto, movimientos como Safe Zone buscan crear espacios libres de violencia y exclusión. Además de promover actividades culturales y de esparcimiento al aire libre, se enfocan en trabajar con el entretenimiento para mejorar la calidad de vida de la comunidad y fomentar la vinculación y el desarrollo personal.

El año pasado, se registraron 1,175 quejas por discriminación relacionadas con la diversidad sexual y de género, según CONAPRED. La salud mental también es un tema importante, ya que al menos el 81% de las personas de la sexodiversidad han experimentado problemas de salud mental como estrés o depresión, según el INEGI.

Trabajar en la autopercepción y promover actividades de entretenimiento son aspectos clave para mejorar la vida de las personas LGBTIQ+. Esto no solo beneficia su salud física y mental, sino que también ayuda a mantener su existencia presente en la sociedad y dentro de la comunidad.

La construcción de espacios libres y seguros para la comunidad LGBTIQ+ es fundamental para garantizar la igualdad y el respeto que todos merecemos. Es necesario seguir trabajando para superar los desafíos y promover la inclusión en todos los ámbitos de la sociedad.

Post Author: anodis