Luego de las dos pausas que tuvo que hacer el árbitro César Ramos en el partido de Cruz Azul frente a Rayados de Monterrey, correspondiente a las semifinales de la Concachampions, por el grito homofóbico, la Concacaf anunció mediante un comunicado que abrirá una investigación que podría derivar en una sanción para el Estadio Azteca y para La Máquina.
El 16 de septiembre de 2021 se vivió uno de los hechos más penosos de la historia reciente del futbol mexicano durante el partido que enfrentó a Cruz Azul y Monterrey.
En la semifinal de la Liga de Campeones de la Concacaf, la afición de la maquina celeste, aparentemente para intentar frenar la goliza en propia casa que les estaba propinando el equipo regio, comenzó a lanzar un grito homofóbico.
A pesar de que el sonido local del Estadio Azteca buscó concientizar a los presentes de los problemas que podría traer para el equipo este acto, los asistentes no pararon y el juego se interrumpió en un par de ocasiones.
Desde el primer momento se volvió viral la mala actitud de los fans celestes, que en su mayoría fue criticada tanto por aficionados como por los expertos al balompié.
Finalmente hoy la Concacaf lanzó un comunicado, en el que se dicen “decepcionados” por los hechos acontecidos en el Estadio Azteca, y anuncian que ya están analizando las posibles sanciones en contra del Cruz Azul.
En la parte más importante del comunicado se afirma:
“Concacaf está extremadamente decepcionada por el lenguaje ofensivo y discriminatorio gritado por un gran número de aficionados de Cruz Azul durante la Semifinal de vuelta de la Liga de Campeones Concacaf Scotiabank. Felicitamos a los árbitros por activar correctamente el protocolo antidiscriminación y a la seguridad del estadio por expulsar a cientos de aficionados de Cruz Azul cuando el partido estaba suspendido.”
Con respecto a la probable sanción en contra del Cruz Azul, la Concacaf dice lo siguiente:
“Dado que los aficionados del club local evidentemente participaron en el uso de lenguaje discriminatorio, este caso está siendo remitido al Comité Disciplinario de Concacaf, quien investigará. Se proporcionará una actualización al final de este proceso disciplinario.”
Es muy probable que el Cruz Azul reciba una sanción y, como ya está calificado para participar en la Liga de Campeones de la Concacaf 2022, por ser el vigente campeón mexicano, su castigo podría ser una sanción económica, el veto al estadio por uno o dos partidos o, en uno de los casos más extremos, podría significar una expulsión del equipo de los torneos internacionales.