El atleta Marc Tur, que fue cuarto en los 50 kilómetros marcha de los Juegos de Tokio, ha explicado que es “abiertamente gay” en una publicación en su cuenta de Twitter. El ibicenco ya había defendido anteriormente al colectivo LGTBI en las redes sociales y también había denunciado algunas de las injusticias que siguen vigentes en la sociedad.
“Soy abiertamente gay, ni soy de los primeros Olímpicos homosexuales en reconocerlo, ni espero ser de los últimos por el hecho de darle más visibilidad al colectivo. Ellos me ayudaron a romper con mis inseguridades, mis miedos y me enseñaron a luchar por lo que quiero sin importar el resto”, indicó el deportista, de 26 años.
Más allá del sector del atletismo, Tur era un desconocido para el gran público hasta que el pasado 6 de agosto estuvo a escasos metros de subir al podio de los 50 kilómetros marcha en la cita olímpica. El alemán Jonathan Hilbert y el canadiense Evan Dunfee le superaron en la recta final cuando el español ya rozaba la gloria.
Ahora, gracias a su mayor popularidad, se ha erigido como uno de los portavoces de una lucha tan justa como necesaria. “Aunque parezca mentira, esos sentimientos negativos que pude llegar a tener en su día los he transformado en algo por lo que luchar y me ayuda a sacar todas mis fuerzas cuando estoy compitiendo. En un mundo en el que todavía queda mucho por hacer, cada granito cuenta”, concluyó su mensaje.
Tur es graduado en medicina y hasta la prueba en Sapporo no había conseguido grandes logros en el atletismo. En el Mundial de atletismo del 2019 en Doha acabó en la decimonovena plaza y en el europeo del 2018, celebrado en Berlín, terminó vigésimo segundo, en ambos casos en la disciplina de 50 kilómetros marcha.
El pasado 28 de junio, con motivo del día del orgullo, Tur publicó un extenso texto para recordar las protestas en el Stonewall de Nueva York, en 1969, que dieron origen a la celebración. El atleta se felicita por los avances sociales en los últimos 50 años, pero recuerda las constantes “agresiones homófobas y tránsfobas”, “el bullying entre los adolescentes” por su condición sexual, las dificultades de las personas trans para encontrar trabajo o los insultos que reciben las personas del colectivo por el “el simple hecho” de besarse o ir cogidos de la mano.
En esa misma fecha pero en 2018 concluyó en otra publicación junto a una foto con los colores de la bandera gay que “cualquier camino es el correcto siempre que la meta sea amar”. Del mismo modo que el balear, el campeón olímpico en Tokio de trampolín de diez metros sincronizados, el británico Tom Daley, también dijo durante los Juegos que estaba “orgulloso” de ser gay. Ambas voces servirán para luchar por la igualdad de las personas sin importar su orientación sexual.
