La ciudad de Munich pedirá a la UEFA autorización para iluminar su estadio con los colores arcoíris de la comunidad LGBT el miércoles en el partido de Alemania contra Hungría, en señal de protesta contra una ley considerada discriminatoria votada la semana pasada por la mayoría del Primer ministro Viktor Orban.
El alcalde SPD (socialdemócrata) de Munich Dieter Reiter “escribirá el lunes a la UEFA” para trasladar a la instancia organizadora del torneo una moción elaborada en Consejo municipal y aprobada por todos los grupos políticos, indicó este domingo un portavoz del ayuntamiento.
“La capital del Land (de Baviera) tiene como valores la diversidad, la tolerancia y la igualdad en el deporte y en toda la sociedad”, señala la moción, y la iluminación del estadio pretende ser “un símbolo visible de solidaridad con la comunidad LGBTI de Hungría”.
La pelota está ahora en el tejado de la UEFA, que no se pronunciará antes de haber recibido la petición oficial procedente de Munich.
El Arena de Munich (que pertenece al Bayern Munich) es una estructura translúcida que permite modificar los colores de la iluminación de la fachada.
Esta iniciativa pretende dar respuesta a una ley aprobada el martes en Hungría que conducirá, según varias ONG, a prohibir programas educativos, anuncios, libros o series en los que la homosexualidad sea evocada.
Por su parte, el Gobierno húngaro criticó este lunes como “dañinos y peligrosos” los planes del Ayuntamiento de Múnich de iluminar esta semana durante el partido entre Alemania y Hungría en la Eurocopa el estadio Allianz Arena con los colores del arcoíris en apoyo de la comunidad LGTB del país centroeuropeo.
El ministro de Exteriores húngaro, Péter Szijjártó, dijo este lunes en declaraciones a la prensa de su país al margen de una reunión ministerial en Bruselas que “en la propuesta de iluminar (el estadio) se detecta claramente la intención de mezclar la política con el deporte, porque todo el mundo sabe de qué se trata”.