por Diego Loyola *
Es importante hablar sobre un tema que hace días ocurrió, la muerte del magistrade Ociel Baena, lo cual fue una alerta a nivel nacional para la comunidad LGBTTTI. La realidad es que todas las personas podemos hacer visible nuestra identidad u orientación, mostrarnos con orgullo; eso realmente no debería costarnos la vida, como sucedió en esta ocasión.
Su muerte ha conmovido e indignado no solo a la comunidad LGBTTTI, sino también a políticos. La verdad es que Baena habría recibido amenazas de muerte a través de redes sociales. En julio de este año, después de que el activista Ulises Nava fuera asesinado a tiros, precisamente en un evento convocado por el magistrade, solicitó medidas de protección a la Guardia Nacional.
Con tan solo 38 años, Ociel Baena era la primera persona no binaria en ocupar el cargo de magistrade en México. También fue el primero en obtener un pasaporte no binario en el país, entregado por el propio canciller, Marcelo Ebrard. Cuando asumió el cargo de magistrade en octubre de 2022, no dudó en afirmar su identidad. Los tacones, la ropa combinada entre lo femenino y masculino, multicolor, construyeron su vestimenta no solo en los tribunales, sino también en público.
Ociel se convirtió en un modelo para las personas no binarias debido a su impugnación para acceder a la magistratura. Entre las iniciativas que impulsó se encuentra, la modificación de la credencial para votar en México, que previamente solo incluía las opciones hombre/mujer; logró que se agregara la opción X, representando a las personas no binarias. Esta modificación fue aprobada en febrero de este año y permitió que más personas accediera a ese derecho.
La realidad es que esta muerte para las personas no binarias, significó el inicio de una posible persecución por parte de poblaciones que no aceptan a esta comunidad. Un ejemplo de ello es lo que sucede con la comunidad trans, que sufre asesinatos a diario tanto de mujeres como en hombres trans. Sin embargo, la población trans es la más violentada y asesinada, incluso por parte de la misma comunidad LGBTTI.
La población en México espera una respuesta política sobre la muerte de Ociel, ya que se dice que fue un asesinato pasional perpetrado por su propia pareja. Es preciso mencionar que existen asesinatos pasionales, así como persecuciones políticas, entre otros. Queda una gran intriga y duda sobre quién tiene la verdad oculta de este lamentable suceso que ya mero cumple un mes de haber sucedido y aún las autoridades judiciales de Aguascalientes no aclaran los motivos del asesinato del magistrade y su pareja sentimental.
* Activista trans. DJ/Productor, Editor y Colaborador de El Sol de México.
