Cientos de integrantes de la comunidad de la diversidad sexual participaron la tarde de este domingo en la XVI Marcha del Orgullo LGBT+, que partió de las instalaciones de la Casa de la Cultura rumbo al jardín Libertad, frente a la Catedral y el Palacio de Gobierno, adonde llegó tras recorrer la Calzada Galván y la calle Madero.
En un ambiente festivo, cantando y brincando mientras gritaban consignas, hombres y mujeres —jóvenes en su mayoría— infundieron vida y colorido a la manifestación, portando además numerosas banderas con los colores del arcoíris, así como las azules con blanco y rosa que identifican a la comunidad trans:
Sin embargo, también destacó la exigencia de que se detengan los crímenes de odio contra la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti, Intersexual y Queer (LGBT+) y de que se haga justicia en los casos de asesinatos y atentados contra integrantes de este sector de la población.
“La violencia se ha recrudecido llegando a niveles terribles; si el año pasado marchamos por Valeria Carrasco, este año tenemos que exigir justicia por Yanet Hernández Zavala, mujer trans asesinada en abril de este año, así como por dos intentos de transfeminicidios reportados y por tantas personas desaparecidas y asesinadas durante los últimos seis meses”, señaló la doctora Jonás Larios, mujer trans encargada de leer el pronunciamiento central de la marcha.
Añadió que “la guerra permanente que vivimos en Colima genera el clima propicio para que las agresiones contra las disidencias sexogenéricas se incrementen, se normalicen y queden impunes; por esto salimos a las calles y protestamos”.
A través del documento, las organizaciones de la diversidad sexual exigieron que el Congreso de Colima cree leyes que tipifiquen y castiguen con procesos de investigación profesionales los crímenes de odio que ocurren contra la comunidad LGBT+.
Así también, exigieron que en todas las entidades federativas se aprueben leyes para mejorar el acceso al campo laboral a las personas de la diversidad sexual, con énfasis para las personas trans, además de que los centros escolares de todos los niveles educativos, públicos y privados en el estado de Colima, incorporen en sus reglamentos la perspectiva de diversidad sexual que proteja las vidas de la niñez, adolescencia y juventud trans.
Otras demandas de la población LGBT+ leídas por la doctora Larios, quien es investigadora de la Universidad de Colima, plantean que el sistema público de salud tome en cuenta el Protocolo para el Acceso sin Discriminación a la Prestación de Servicios de Atención Médica de las personas LGBT+, que ha sido “vergonzosamente ignorado”, y que los trámites de cambio de identidad de género sean gratuitos en su totalidad y armonizados por las instancias de gobierno municipal, estatal y federal.
Las organizaciones reivindicaron este día desde la fiesta, la lucha y la protesta, contra la violencia que cuesta la vida y la paz al sector de la diversidad sexual, en rechazo a las respuestas gubernamentales basadas en la criminalización de las víctimas y contra los transfeminicidios y crímenes de odio.
Tras reivindicar el orgullo como fiesta, lucha y protesta, la comunidad de la diversidad sexual festejó que en el último año en Colima su lucha logró avances importantes con “la derrota de los partidos de la derecha más conservadora en el Gobierno y Congreso del Estado: la prohibición de las terapias de conversión Ecosig y la aprobación del derecho a decidir también para las personas gestantes trans y no binarias”.
La marcha fue acompañada y resguardada por personal de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Colima (CDHEC).
