En el corazón de la Ciudad de México, Casa Frida se erige como un refugio para quienes más lo necesitan.
Esta organización sin fines de lucro extiende sus manos hacia la comunidad LGBTIQ+ que huye de extremas violencias, perseguidas por el crimen organizado, o aquellos jóvenes que son injustamente expulsados de sus hogares debido a su orientación sexual, identidad o expresión de género.
Además, apoya a sobrevivientes de los Esfuerzos por Cambiar la Orientación Sexual, Identidad de género (ECOSIG).
Raúl Caporal, activista por los derechos de esta comunidad y director y fundador de Casa Frida, ha marcado una diferencia tangible. Bajo su liderazgo, la organización surgida el 13 de mayo de 2020 ha emergido como una solución sólida y efectiva frente a las adversidades socioestructurales que esta comunidad enfrenta, agudizadas durante la emergencia sanitaria.
La misión de Casa Frida va más allá del mero alojamiento. Proteger y brindar servicios integrales de apoyo, ofreciendo desde apoyo legal, psicosocial y médico, hasta seguridad alimentaria y vivienda. Todo ello con el fin último de garantizar la justicia transicional para los derechos sociales, así como la reinserción económica y cultural.
Los logros de Casa Frida son innegables:
- 2200 personas LGBTIQ víctimas incorporadas a sus programas.
- Entrega de 450,000 platillos garantizando seguridad alimentaria.
- Más del 70% logrando recuperar su autonomía económica.
- Más de 145 empresas asociadas generando vacantes dignas y seguras.
- Acompañamiento a más de 700 personas extranjeras en búsqueda de protección internacional.
- Más de 2000 atenciones psicosociales y médicas.
- Canalización de más de 1000 personas a servicios públicos.
Uno de los programas más destacados es Contrata LGBTIQ, que busca generar un espacio de trabajo libre de discriminación para la comunidad. Además de asistencia en la elaboración de CVs, se proporciona capacitación y se asegura que las empresas asociadas ofrezcan un entorno seguro e inclusivo.
Gracias a la incansable labor de Casa Frida y su comunidad aliada, hoy se marca la diferencia en cientos de vidas. Una luz en medio de la adversidad, mostrando que el amor, el respeto y la inclusión siempre prevalecerán.