La diputada Teresa Castell ha tomado medidas legales en respuesta a lo que considera ataques, falsas acusaciones y amenazas dirigidas hacia ella por parte de María Clemente, Salma Luevano, Victoria Sámano y Laurel Miranda.
Como lo había anunciado previamente, Castell ha presentado denuncias formales en su contra ante la Fiscalía de la Ciudad de México y el Instituto Nacional Electoral (INE).
En un comunicado público, la diputada hizo hincapié en que no se dejará amedrentar ni silenciar por tener opiniones divergentes. Afirmó que las “calumnias y amenazas” tienen consecuencias, y denunció la violencia política de género que ha experimentado. Además, informó que presentará una demanda por daño moral ante el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México.
La diputada reiteró su postura de que Clemente y Luévano no están ocupando un espacio que les corresponda y afirmó que en dos años se han dedicado exclusivamente a “agredir a las mujeres”. Argumentó que la violencia no se combate con más violencia y criticó la manera en que las representantes defienden sus causas.
Asimismo, Castell enfatizó que la comunidad LGBT no es responsable de las malas representaciones en el Congreso, y sostuvo que la responsabilidad también recae en Morena por permitir que “personas incapaces” ocupen cargos públicos en su afán de imponer su agenda progresista.
La diputada subrayó que su trabajo es legislar y “no generar escándalos o llamar la atención”. Sin embargo, presentó una iniciativa de reforma al artículo cuarto constitucional que busca establecer la existencia de dos géneros en cuestiones de salud, deporte y derechos de los niños.
Castell consideró que no se pueden otorgar “privilegios” a ciertos sectores y resaltó que han sido años de lucha para conquistar espacios públicos, y ahora se encuentran personas ajenas que se aprovechan de esas conquistas. Cuestionó la supuesta paridad de género en esta legislatura, calificándola como un mito. A pesar de las “amenazas continuas” por parte de Clemente y sus seguidores, Castell afirmó que no dejará de luchar.
Enfatizó que pensar diferente no es un delito y no debe ser un pretexto para atacar a los demás. La diputada se comprometió a seguir defendiendo a las mujeres y a la niñez en cualquier situación que sea necesario.
