Oswaldo Calderón, La Superperra: Un Icono del Drag que Revolucionó la Cultura Mexicana

Este día nos adentramos en la vida y legado de una personalidad que marcó un antes y un después en la cultura drag en México. Nacido el 6 de julio de 1973 en la Ciudad de México, Oswaldo Calderón, mejor conocido como La Superperra, se ha convertido en un ícono del movimiento LGBTIQ+ en el país. Si estuviese vivo, hoy estaría soplando 50 velas en su pastel de cumpleaños.

La travesía de La Superperra en el mundo del espectáculo comenzó en 1997, cuando junto a La Supermana creó el revolucionario show drag de las HermanasVampiro. Esta propuesta innovadora y desafiante se ganó rápidamente un lugar en el corazón del público, y no sólo dejó una marca indeleble en la escena drag mexicana, sino que también ayudó a abrir un espacio de inclusión y diversidad en la sociedad.

El legado de La Superperra no se apagó con su partida. Gracias a Antonio Marquet, su voz y espíritu siguen vivos en “El coloquio de las perras”. En su obra, el autor rinde homenaje a Oswaldo Calderón y, a través de su historia, transmite el mensaje de autenticidad, valentía y resistencia que siempre caracterizó a La Superperra.

La Superperra, más allá de su carisma y su talento innato para el espectáculo, fue un defensor incansable de los derechos de la comunidad LGBTIQ+. Oswaldo Calderón se convirtió en un faro de esperanza y un modelo a seguir para muchos, mostrando que se puede romper barreras y cambiar paradigmas a través del arte.

Hoy, en lo que habría sido su 50 aniversario, celebramos a este icono, Oswaldo Calderón, La Superperra, cuyo legado continúa impulsando la inclusión y diversidad en México. A través de su obra, demostró que la autenticidad es una de las formas más poderosas de resistencia y que todos, sin importar su orientación sexual o identidad de género, tienen un lugar en el escenario de la vida.

Post Author: anodis