Un estudio muestra que la transmisión de esta virulenta variante es mucho más alta de lo que se pensaba anteriormente.
Esta nueva variante llamada Clado II, más conocida como la variante de África occidental, que se globalizó en mayo de este año ha infectado a más de 77 mil personas en 103 países.
El número de casos está disminuyendo en Europa y en Norteamérica gracias a las campañas de prevención y vacunación otra variante, diez veces más mortal, avanza en África Central y posiblemente podría desencadenar nuevos brotes globales.
El estudio realizado por investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, la Escuela de Salud Pública de Kinshasa y el Ministerio de Salud Pública de la RDC plantea nuevas preocupaciones sobre que esta variante de la viruela del mono pueda causar más casos en las comunidades africanas.
Además, el equipo de científicos encontró evidencias de que el virus, que se cree que es albergado por roedores, se está propagando de los animales a los humanos con mayor frecuencia, lo que, según apunta el informe, “brinda más oportunidades para que se extienda entre las personas”.
Los casos de viruela del mono en los países africanos en los que tradicionalmente se ha detectado la enfermedad han aumentado durante los últimos años, incluida la reaparición del virus en Nigeria después de 40 años sin que se registraran casos allí.