Alrededor de 99 por ciento de actos de discriminación contra personas de la comunidad Lésbica, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti, Intersexual, Queer y más (Lgbtttiq+) no son denunciados por, entre otras cosas, trámites burocráticos de las instituciones, señaló Heizel Sánchez, presidenta estatal del Comité de Diversidad Sexual.
Ha habido algunos casos por tratos de este tipo –refirió-; es lamentable decir que uno de ellos fue cometido por un servidor público, hacia una persona homosexual.
Por esta razón se trabaja en la difusión del derecho de esta población de la diversidad sexual en Tlaxcala, para que recurra a las instancias competentes y denuncie las agresiones que la sociedad, funcionarios o autoridades realicen en su contra.
Resaltó que la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) “es una aliada” para la comunidad Lgbtttiq+, pero que aún se requiere de una mayor divulgación, pues la que se realiza no ha sido suficiente para dar a conocer la existencia de esta institución en la que se pueden presentar quejas o denuncias.
Ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), hay algunos casos de Tlaxcala; se les ha dado seguimiento pero muchas veces los protocolos son tardados y exigen la presencia física de la víctima, por lo que se quedan así, “no hay una respuesta certera de solución”, abundó.
Este tipo de actos “están a la orden del día -apuntó-, lamentablemente la desconfianza hacia las instituciones es mucha, tanto por la comunidad como por la sociedad en general… no hay acceso real al poner protocolos tan largos, tan burocrático, porque no se tiene solvencia para ir y venir a la capital del estado o del país. Así se queda”.
Aseveró que en Tlaxcala “tenemos una de dos, o nos defendemos y buscamos a nuestros pares para hacer una denuncia, o simplemente nos quedamos callados”. Dijo que se observa una mayor cerrazón para la incorporación de la comunidad Lgbtttiq+ al sector laboral, pues muchas vacantes que se ofertan ya sea en el ámbito público o privado, no están dirigidas a ninguna persona de este sector.
Recalcó que cuando la población de la diversidad sexual muestra interés en conseguir un empleo, “le ponen muchos pretextos en cuanto a experiencia y nivel de estudios; muy poco se toma en cuenta la iniciativa y las ganas de salir adelante”.
Insistió en que también se obstaculiza a la comunidad trans, tanto a hombres como a mujeres, en el acceso a los servicios de salud; “a ejercer este derecho, para conocer con certeza” la condición que tienen en esta materia, sobre todo en el caso de quienes se someten a tratamientos hormonales.
“Muchas veces por automedicarse recaen en algún tipo de enfermedad por el uso y abuso de medicamentos hormonales”, lo cual es un asunto que preocupa, ya que aún se carece de atención especializada en el estado, acentuó.