Por Antonio Medina Trejo @antoniomedina41
Para Arturo Díaz Betancourt + y Carlos García de León
La señora Alicia Valle, madre del activista Francisco Estrada Valle, fundador de la organización civil AVE de México, fue una mamá que ante el dolor del asesinato de su hijo y su lucha por esclarecer el crimen y castigar al o a los culpables, luchó persistentemente desde mediados de los años 90 hasta el último día de su vida.
El doctor Francisco Estrada fue un activista de la lucha contra el sida. Era médico de profesión y junto con el doctor Carlos García de León y otros activistas, emprendieron el proyecto de crear una Asociación Civil para informar a la sociedad sobre la prevención y atención del VIH y el sida. Ello, ante la falta de políticas públicas y las altas prevalencias en aquellos años, particularmente en las poblaciones de hombres homosexuales.
El 12 de julio de 1992 el médico Francisco Estrada Valle, junto a otros dos compañeros de habitación, fueron asesinados de manera cruel. El suceso trascendió a los medios y se emprendió una lucha desde el activismo por esclarecer lo que a todas luces se veía como crímenes de odio por homofobia.
La madre de Estrada Valle, a pesar del dolor, emprendió una lucha personal por la justicia a favor de su hijo y sus amigos. El médico Carlos García de Léon, junto con otros activistas presentaron a la señora Estrada con el escritor Carlos Monsiváis y junto con periodistas del Suplemento Letra S, del periódico La Jornada, emprendieron un proceso de denuncias mediante la Comisión Ciudadana de Crímenes de Odio por Homofobia (CCCOH) que se gestó desde finales de 1995 y vio la luz el 13 de mayo de 1998.
Fue la indignación, la ira, la persistencia y el amor de la señora Estrada lo que mantuvo una lucha constante de activistas por los derechos humanos de la diversidad sexual por más de tres lustros en torno a esa Comisión Ciudadana, desde donde se logró visibilizar y nombrar la “homofobia” en los medios de comunicación, que permitieron dar a conocer, no sólo el crimen del doctor Estrada Valle y sus amigos, sino de decenas de crímenes que se comenzaron a documentar a partir de 1998 hasta la fecha.
Gracias a esa lucha, que era motivada por el dolor de una madre, es que el activismo de la diversidad sexual en México hoy puede tener instrumentos en leyes propuestas en Ciudad de México y otros siete estados donde se tipificaron los crímenes de odio motivados por la orientación sexual e identidades de género diversas, además de la creación de una fiscalía especializada en la capital del país y otras políticas públicas que han permitido visibilizar y luchar contra la LGBTfobia desde los espacios del Estado.
La defensa en vida de la orientación sexual de su hijo Pillo, como ella le decía, hizo que la señora Alicia Valle luchara, a pesar del conservadurismo y machismo de su esposo y familiares, por la dignidad de su hijo Francisco. Muchos son los relatos que narró en entrevistas y en conferencias, foros, congresos y talleres con padres y madres de personas LGBT. Ella se convirtió en activista y gran defensora de la comunidad de la diversidad sexual en México. Su presencia en marchas del orgullo de la Ciudad de México por más de una década tuvo como oradora y marchista principal a la señora Alicia Estrada.
Como anécdota personal, puedo decir que la señora Estrada trabajó de cerca con quienes construimos la metodología y argumentos del proyecto de la CCCOH, y cuando se dio a conocer dicha Comisión en Casa del Poeta, le hicimos un discurso depurado con sus propias palabras, pero al final no lo leyó, prefirió expresarse como lo sentía -y fue mejor- ya que sus palabras, su dolor y su indignación comunicaron con profundidad el sentir de ella por la muerte de su hijo y su exigencia al Estado mexicano para castigar a los asesinos.
Sirvan estas líneas para honrar la vida de esta gran luchadora social a la que el movimiento de la diversidad sexual le debemos mucho. Ella falleció este 18 de noviembre en su natal Guanajuato, pero nos lega su lucha en contra la LGBTfobia, la cual comenzó a conocerse en México con datos, análisis y reflexiones desde el activismo, la academia y las instituciones públicas, a partir de su lucha personal y política que inició después del crimen de su hijo.