La Casa Nem, un refugio para personas LGBT en tiempos de pandemia

En un patio ubicado a unas cuantas cuadras de la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, una decena de personas se acomodan en sofás rotos bajo una pancarta con la leyenda: “Cura tu prejuicio”. Observan un escenario improvisado en el que aparece una mujer con un corto y ceñido vestido, que entona una canción sobre la visibilidad de las personas transgénero.

Una noche de sábado como cualquier otra en la época del coronavirus en Casa Nem, un edificio ocupado ilegalmente.

El edificio de seis pisos alberga a cerca de 50 miembros de la comunidad LGBTQ que se resguardan de la pandemia tras puertas cerradas. Reciben donaciones de comida y tiene prohibido salir a menos que enfrenten una emergencia médica o bajo circunstancias excepcionales.

El aislamiento voluntario es una de las pocas maneras que este grupo, tradicionalmente marginado, ha encontrado para reducir los riesgos de COVID-19, mientras los demás continúan estando vulnerables en las calles.

“Basándome en la experiencia que tuvimos durante la epidemia de sida, cuando se nos acusó de ser un vector del virus y se nos dejó a nuestra suerte, ahora estamos protegiendo a la comunidad”, dijo Indianara Siqueira, una trabajadora sexual transgénero de 49 años y activista que dirige Casa Nem.

“Estoy asustada”, reconoció. “Sé que estoy en riesgo”.

Post Author: anodis